Te proponemos una amplia variedad de rascadores capaces de sacar a relucir el lado más feliz y agradable de tu gato esté donde esté. ¡Cómpraselo y no le conviertas en un gato triste y arisco!
Son los más sencillos y económicos del mercado. Suelen estar hechos principalmente de cuerda de sisal o de cartón corrugado de gran resistencia. Ocupan poco espacio, enfocados para gatos jovencitos, gatos de mayor edad o con dificultad para moverse.
Has de tener en cuenta el tamaño de tu gato para que el rascador debe ir en proporción a nuestro felino, para que no sea ni muy grande ni muy pequeño.
Así también tu gato podrá tumbarse encima para poder descansar después de sus sesiones de rascado.